El sol, lo veas o no, acaricia desde el día la luna, así ella convierte la noche en plena.
Al Abrazo de su luz transforma sombra en brillante magnetismo, dejando de ser triste y gris, para iluminar todos los deseos del alma y no perderlos o dejar que pasen de largo.
La noche extravía en la luna llena su oscuridad.
Y las estrellas descienden sobre los árboles, invitándoles a elevarse en sus tintineos y brillos, hasta abrazar su belleza.
Es cuando la Luna llena brilla mágica sobre un árbol de estrellas, que valeroso cedió sus hojas al pálpito del CORAZON.
Elvia Cor
3 comentarios:
Qué puedo decir, es hermoso! Y la paz de escuchar las olas del mar mientras lo leo. Gracias.
Luna llena y mar de fondo, si preciosa amiga. No puedo añadir más, es hermoso!
Graciassssssss
Con cariño, Elvia.
hola
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